Hablemos de la suerte:
1. ¿Conoces gente pavosa, con mala vibra?
2. ¿Hay gente insoportable que te hace molestar?
3. ¿Alguien a quien aprecias le ha ido mal por no haberte hecho caso?
4. ¿Conoces gente muy terca?
5. Hay gente buena. ¿Pero también hay gente muy mala?
6. ¿Conoces al menos una persona muy soberbia, que no acepta sus errores?
7. ¿Sabes de alguien que se da la gran vida y realmente no se lo merece?
Si has contestado afirmativamente a por lo menos cuatro de estas preguntas puedes considerarte una persona responsable, con principios y bien educada. Pero no tienes suerte. ¿Verdad que no?
Claro que no la tienes. Y no es culpa de nadie. Ni siquiera tuya.
Ahora puedes calcular tu suerte.
Y conociendo los dos elementos que forman la suerte es posible modificarla a voluntad.
Suerte = Luces - Cruces.
La luz es la unidad de medida de las bendiciones. La cruz lo es del karma.
Desde hoy vas a conocer la causa de tus karmas. Y vas a conocer sus antídotos, que son las bendiciones.
Como los virus, que sirven de vacuna contra ellos mismos, a veces, hay que ingerir dosis de cruces para bañarnos con agua bendita. Pero pasarse de la dosis causa la muerte.
¿Un ejemplo? Apostar en juegos de envite y azar genera una cruz, 7 puntos de karma por apuesta. Se realiza un asiento contable, no en US$, sino en "Puntos":
En el debe:
• Gastos en Juegos y Apuestas = 7
En el haber:
• Cuentas por Pagar = 7
Pero, aun así, se puede recibir una bendición por ganar la lotería. Más otra por leer un libro.
En el debe:
• Activos. Bendiciones Recibidas
1. Premio Gordo de Lotería = 49
2. Conclusión lectura de "Niños Cuánticos" = 7
En el haber:
• Bendiciones por Recibir = 56
Y ¿cómo es eso que apostar coge karma y ganar la apuesta recibe bendiciones? Sencillamente porque, desde hace tiempo, amén de otras acciones que veremos en el libro, se habían venido invirtiendo unos churupos en diezmos y donaciones. Caridades que valen 7 luces. Y había saldo de dónde sacar para las Bendiciones Recibidas. En el balance había más luces en el Activo que cruces en el Pasivo. Había más Bendiciones por Recibir que Cuentas por Pagar.
Solo en una oportunidad se procedió con este asiento.
En el debe:
• Bendiciones por Recibir = 147
En el haber:
• Donaciones de Caridad = 49
• Diezmos y Dádivas a la Iglesia = 49
• Adquisición de "Niños Cuánticos" = 49
Y se explica así porque no todos ganan a la lotería, teoría de la probabilidad incluida.
Pero se pueden hacer proyecciones a futuro con base en escenarios de comportamientos esperados, propios y ajenos. Lo que resultará de suma utilidad para prever luces y cruces en el camino, en caso de no poner nada de vuestra parte, y continuar las cosas como están.
Es una oportunidad única de convertirse en profeta de su propio destino.
¡Si el balance del día anterior terminó con más cruces en cuentas por pagar que luces en cuentas por cobrar. Y de no haber luces atesoradas en el Activo, no habrá de donde sacar, y menos registrar, ninguna «Bendición Recibida»!
Una Cruz son siete karmas.
Una Luz son siete bendiciones.
Suerte = Luces - Cruces. ¡Ahora se puede calcular!
